Gemma se quedó sin su piso, con deudas en ASNEF y con la hipoteca denegada en la calle.
El caso de Gemma Pascual de 51 años, es de esos casos en que no quisieramos vivir en nuestras propias carnes ni si quiera para un amigo, familiar o conocido. Gemma, una chica de gran corazón, de buen carácter, vivió la parte amarga de la financiación y deudas pendientes. Con su piso de propiedad a mitades con su ex-pareja, y una relación terminada, decidieron vender el piso con la intención de liquidar deudas pendientes y a la vez, Gemma comprarse un nuevo piso para su nueva familia y sus hijas.
Cuando su piso estaba en proceso de venta, con arras firmadas y con fecha de firma, se dió cuenta de la situación en que se encontraba, ni si quiera vendiendo su piso actual podría solicitar una nueva hipoteca para un nuevo piso, por su historial crediticio. Recorrió a brokers, incluso contrató a una empresa de intermediación financiera que se comprometió en conseguirle la hipoteca y a pesar de hacer todo lo posible por ayudarla, ni estos ni nadie pudo ayudarle a sacar la hipoteca que tanto le urgía para comprar su nuevo piso y no verse en la calle ya que su piso tenia fecha de firma para la venta.
En ASNEF, RAI, en CIRBE y en los ficheros de morosidad estaba Gemma, ficheros tediosos que en alguna ocasión para salir limpio de ellos suele ser una tarea especializada. Con deudas históricas en algunas instituciones bancarias y con las nuevas subidas de los tipos de interés en pleno auge, con las nuevas condiciones bancarias de financiación y con su único perfil como titular, todos los bancos le denegaban la hipoteca, se encontraba con montones de solicitudes de hipoteca enviadas a distintas entidades bancarias y todas las respuestas eran de solicitud de hipoteca denegada. Gemma se quedó sola y sin amparo con una hipoteca denegada, y con una operación tan complicada como prácticamente inviable para solicitar una nueva hipoteca.
Ante esta situación Gemma con menos ganas, decepcionada, se veía cada vez mas cerca de la calle con sus hijas, sin hipoteca y con menos esperanza de cambiar su vida que cuando empezó y todo le resultaba cuesta arriba.
Ayudar a Gemma fue todo un reto de empeño y compromiso total
Gemma con una gran preocupación se le echaba encima la fecha limite para conseguir hipoteca corriendo el tiempo en su contra, recorriendo mar y tierra en busca de que la situación cambiará y encontrara esa hipoteca que algún banco le concediera y que tanto necesitaba.
Cuando Gemma decidió venir a AYA hipotecas y conocimos su historia y su operación, no fue solo un reto de los que te pones las manos a la cabeza, sino que fue un empeño, un compromiso total en querer ayudar y mejorar la vida de Gemma, porque sabíamos que nos necesitaba de verdad y la suerte nuestra en AYA hipotecas es que sabíamos como hacer esto posible en un tiempo bastante rápido con tampoco margen que nos daba la operación en si misma para conseguirle la hipoteca.
El tratar como seres humanos a los clientes de la mejor manera posible, es un compromiso que no hay que pasar por alto, y es que no todas las personas como ya sabéis tienen la suerte a su favor en algún momento de sus vidas. Pero si que está en nuestra mano lo que podamos hacer nosotros mismos por esas mismas personas y ayudar a que puedan tener una mejor vida, a una mejor suerte, o incluso unas mejores condiciones.
Una operación de hipoteca difícil, muy difícil.
Nos pusimos manos a la obra con la operación de Gemma con más ganas que nunca por la situación que estaba viviendo ella y decidimos ir paso a paso resolviendo todos los obstáculos que nos impedían conseguirle la hipoteca. Finalmente dimos con la tecla mágica y tuvimos una buena noticia para Gemma, hipoteca aceptada de Gemma. Además de conseguir la hipoteca se consiguió a un mejor tipo de interés de lo que ofrecían otras entidades bancarias.
Cuando le comentamos a Gemma de que por fin conseguimos que nos aceptarán su hipoteca en una entidad bancaria muy conocida no podía creerlo ni ella ni su familia. El compromiso con nuestra querida Gemma fue la protagonista de la historia.
Hay operaciones que son más llevaderas o mas rápidas que otras dadas las circunstancias de la operación. Trabajar la operación de Gemma fue una superación y satisfacción del saber hacer las cosas bien. Sabemos lo que tenemos hacer y a eso nos dedicamos. Además sabemos lo que nos diferencia de los demás, y gracias a nuestros valores podemos solucionar tipo de operaciones complejas y convertirla a operaciones llevaderas y fáciles de puertas para fuera.
Gemma no aguantó más su emoción por su merecidísima hipoteca
AYA Hipotecas
Integridad a nuestros clientes con un servicio ejemplar
Gracias al trabajo ejemplar en AYA hipotecas Gemma pudo conseguir su hipoteca para su nuevo piso, y empezar una nueva vida de éxito junto a sus hijas y su familia. Gemma dejó una vida atrás para empezar una de mejor pasando pagina hacia un bienestar mayor. Muchas gracias Gemma por dejarnos conocerte, por enseñarnos lo fuerte que fuiste en los momentos más difíciles, por tu gran lucha y tesón, o por tu inagotable paciencia de nunca rendirte hasta conseguirlo, te deseamos lo mejor para ti y tu familia.
Hasta pronto amiga nuestra.
